TAZA DE CAFÉ

Calidez:
Normalmente hablo de las partes frías que han hecho cachos mi alma porque estando en pedazos es difícil pensar en la calma o en los buenos momentos, pero quise dar un respiro y seguir uniendo las piezas de un roto corazón.
Que trae calma a tu vida? Que se te antoja en una mañana helada? O después de una tormenta? Para mi la noche más tranquila y deliciosa incluye una taza de café, blues, una cobija y mi sofá...llegar a este momento del día después de una situación difícil, de llorar por los recuerdos, de las situaciones que han quebrado mi cerebro y sentir que no hay pendientes que puedo cambiar todo lo anterior por algo que disfruto, que puedo ver al cielo y ver la luna, pensar en mis metas y en lo que falta al dar el primer sorbo puedo simplemente derretirme en la dulzura de una taza.
Algunas de las cosas que comparto con ustedes surgen en este tiempo (aunque la mayoría surgen después de algo impactante o doloroso), este tiempo cosquillea en mi interior y la paz y silencio que traen la noche me desbordan, me traen a la mente una buena charla, un recuerdo quizá bajo la sombra de un árbol, la sonrisa de alguien al compartir un gesto conmigo, etcétera.
Para mi es como una rutina para salir de mi rutina 😋😋 (amo estás cosas locas en mi), preparar mi taza de café simboliza hacer las pases con toda la maraña de emociones que surgen durante el día, quizá al siguiente día vuelvan a surgir nuevos pensamientos pero podre preparar otra taza y otra y otra, todas las que sean necesarias...pero en ese momento al sentir la calidez del primer trago me hace despojarme de todo y poder perdonar y sobre todo perdonarme, sentir el calor, el sabor, el dulce me aquieta y me da esperanza de un nuevo día y nuevas metas, nuevas sonrisas...sentir que aun ante el dolor o la tristeza, ante la negrura o amargura de una semilla intensa, con algo de crema y azúcar se transforma en un néctar relajante, aun si no pusiese azúcar, su calor llena los sentidos y me calienta el alma, la misma bebida que te relaja y te levanta.
En que momentos disfrutamos de esta taza:
* con amigos en una charla
* al compartir con alguien que te toca el alma.
* con familiares en una sobremesa en casa.
* o al caminar por la banqueta rumbo a la rutina de tu cabeza.

Sin embargo ese momento es sagrado, puedes escoger su sabor, intensidad, puedes olerlo y probarlo, quemarte la lengua o soplarle para de a poco entibiarlo.

Puedes entender lo que trato de decirte?
La calidez te acompaña, es cuestión de rellenar tu taza, de elegirla y disfrutarla, de ponerle azúcar o solo probarla, degustarla en tu paladar para cambiar totalmente el color de un día y olvidar un poco tu rutina.
Debo confesar que en estos días días de cero socializar y relacionarnos cara a cara, donde vale más alguien que te encuentras en una red que alguien que te ha entregado su alma, las mejores experiencias de mi vida siguen siendo con otros al probar la tibieza en una taza o el compartir un desayuno cálido por la mañana...valoro más una charla, un abrazo, una caminata que me entibie y me de calma; estos momentos por mucho los elijo ante cualquier circunstancia y soy capaz de olvidarme del mundo si puedo compartir con alguien la calidez de su alma.
En un mundo de corazones rotos y amores rechazados o abandonados  y deseos desahuciados, remendemos otro cachito de corazón al dar el primer sorbo a nuestra taza, al desconectarnos un poco del ruido, al reconectarnos con la profundidad de alguien que disfrute de ti, al tomar tu taza favorita de cálida bebida, al poner esa letra en youtube que te limpia y olvidar por un momento que el mundo se hace trizas; solo no olvides dejar que hierva, endulzarlo al gusto con pequeños gestos y sonrisas, dejando que su calidez elimine lo helado de la noche más densa que ha abrumado tu vida...solo recuerda: siempre una buena taza de café puede calentarte la vida.